Suspensión oral para perros, basada en: Azitromicina; un antibiótico semisintético, perteneciente a una subclase de los macrólidos conocidos como azálidos, que ha mostrado un amplio espectro de actividad ante muchas especies Gram positivas aerobias y anaerobias y también es capaz de inhibir un número considerable de bacterias Gram negativas aerobias y anaerobias.
Tratamiento de infecciones bacterianas causadas por organismos sensibles a la Azitromicina en caninos y felinos en piel, sistema respiratorio, digestivo, oído externo, encías (profilaxis dental).
Contra bacterias como: Leptospira spp., Mycoplasma spp., Campylobacter spp., Chlamydia spp., Staphylococcus spp., Streptococcus spp., Haemophilus influenzae, Bordetella spp., Mannheimia (Pasteurella) spp., Pseudomona aeruginosa, E. coli y Salmonella spp., Coccidiosis, Cryptosporidium spp., papilomatosis viral canina y toxoplasma.
Oral. En caninos: 10-20 mg/Kg de peso (1 mL/2 a 4 Kg de peso). En felinos: 10 mg/Kg de peso (1 mL/ 4 Kg de peso). Cada 24 horas por 3 a 5 días.
Conservar el producto a no más de 30°C en lugar seco, protegido de la luz ultravioleta. Manténgase fuera del alcance de los niños.
En caso de sobredosificación puede causar náuseas, vómito, diarrea y alteraciones hepáticas.
No utilice en caninos hipersensibles a los macrólidos y con problemas hepáticos.
Para su uso, consulte al Médico Veterinario.